lunes, 18 de marzo de 2013

Los Tradiciones - Alepo - Conclusión




Hace mucho que no actualizo el blog y en este tiempo he hecho varios jabones que poco a poco os iré mostrando, aunque antes voy a terminar la serie de “Los Tradicionales”.

Os enseño como están en la actualidad, todos están hechos en Abril del 2012, a punto de cumplir un año, y como veis se ha producido un hecho sorprendente, todos los que están cortados en pastillas siguen manteniendo el color verde, algunos tienen una ligera capa más oscura tirando a marrón en los bordes, pero el único que está cortado en forma de taco ha perdido por completo el color verde y está marrón. No me explico que ha podido pasar, durante este tiempo han estado todos juntos en una caja, de vez en cuando los he dado la vuelta (a todos) ¿Por qué todos siguen verdes menos el que está cortado en cuadrado? Si alguien la tiene una explicación, me gustaría que lo comentara.


Por lo demás os puedo decir que me han encantado,  me he hecho fan de estos jabones,  todos siguen teniendo el mismo olor característico de las bayas de laurel, tienen mucha espuma, son muy cremosos y dejan un aroma muy agradable en la piel cuando los utilizas. Os los recomiendo.

Y para terminar os dejo la entrada del: 

Jabón de Alepo con aceite de argán

 


Propiedades del aceite de argán: (Argania spinosa)
Pertenece a la familia da las Sapotaceae, crece solamente en el sudoeste de Marruecos, su fruto de forma ovalada, de hasta 4 cm de largo tiene en su interior tres semillas de las que se saca el aceite.

El aceite de argán es rico en esqualeno que atenúa las cicatrices, las arrugas y da a la piel tersura y suavidad.

Por su parte su contenido en gamma-tocoferol es un antioxidante más eficaz que el alfa-colesterol y lucha eficazmente contra la oxidación y los radicales libres, ayudando por lo tanto a dar elasticidad a la piel y retrasando la aparición de arrugas y estrías.

Oxigena la piel y restaura la capa hidrolipídica dando elasticidad, suavidad y luminosidad a la piel, hidratándola en profundidad y protegiéndola de la sequedad.

No obstruye los poros y resulta recomendable tanto para pieles grasas o con acné.

Se recomienda su uso en caso de quemaduras solares e irritaciones cutáneas, aliviando el ardor, picor y tirantez.

También se usa para fortalecer las uñas quebradizas, aporta brillo y resistencia al cabello seco, apagado y quebradizo ya que gracias a su contenido en lupeol, favorece la producción de queratina, principal componente de la epidermis, uñas y cabello.
Información sacada en parte de:
 

LA RECETA:

 

75% Aceite de oliva
20% Aceite de bayas de laurel
5%   Aceite de argán.

Sobreengrasado 5%
Concentración 32%


sábado, 8 de septiembre de 2012

Los Tradicionales (V) - Jabón de Alepo con Nigella Sativa


Nigella Sativa(Comino negro)


Una de las variedades del jabón de Alepo es el que en su composición lleva aceite de oliva, aceite de bayas de laurel y aceite de Nigella Sativa (Comino negro), como ya conocemos las propiedades del aceite de oliva y el de bayas de laurel, ahora voy a hablaros del aceite de comino negro.

Nombre botánico: Nigella Sativa

Índices de saponificación; 0,195 Potasa; 0,139 Sosa

Es recomendable hacer una prueba de tolerancia antes de su utilización.
  • No aplicar a niños menores de 2 años.
  • Conservar en sitio fresco.(menos de 20º) ya que es muy sensible a la oxidación,
  • No calentar, ni cocinar.
  • Se puede utilizar tanto para uso alimentario como para aplicaciones locales.
La Nigella Sativa  es una planta de la familia de las Ranuculaceae originaria de Egipto y Creta, de pequeñas semillas de color negro, muy aromáticas que recuerdan el olor de la nuez moscada.


El aceite de comino negro es conocido desde la antigüedad, se llama el aceite de los faraones porque se dice que fue encontrado en la tumba de Tutankhamon, y que ya Cleopatra lo usaba como aceite de belleza.

Tanto las semillas como el aceite tienen aproximadamente 100 componentes, entre ellos: aceites esenciales, vitaminas, encimas, fosfato, hierro, fósforo, carbohidratos y carotenos. Contienen antibióticos que destruyen virus, microbios y bacterias.

En su composición de ácidos grasos, aproximadamente el 56% corresponde a Omega-6, el 23% a Omega-9 que ayudan a equilibrar el sistema inmunitario y a prevenir infecciones y alergias, también tiene aceite esenciales volátiles (nigelona y timoquinona) que son antihistamínicos, antioxidantes, antiinfecciosos y con efecto bronco dilatadores.

Son numerosas sus propiedades para la piel, ya que es cicatrizante, antiinfecciosos y adecuado para pieles irritadas, por su contenido en vitamina E ayuda a evitar el envejecimiento cutáneo, nutre, regenera las quemaduras, incluidas las solares, favorece el bronceado, se emplea para pieles con acné, forúnculos, psoriasis, eczema, micosis, candidiasis y es un activo antiedad para todas las pieles, especialmente las secas y sensibles.

Revitaliza, suaviza y tonifica el cuero cabelludo y el cabello y fortalece el pelo y uñas.

Aplicado localmente el aceite en masajes es útil para contracturas, inflamaciones en las articulaciones, piernas cansadas, dolores de espalda, artritis, reumatismo y contusiones.

Experimentos científicos han demostrado el que el 70% de los pacientes con alergias al polen, polvo o con asma se curaron con nigella sativa.



Mascarilla con jabón de Alepo con nigella sativa, para problemas de la piel:

Aplicar generosamente el jabón sobre la parte afectada dejándolo actuar durante unos minutos, aclarar con agua tibia, repitiendo la operación diariamente. Esta mascarilla tiene efectos calmantes, antiinflamatorios y despigmentantes.

Mascarilla con aceite de nigella sativa:

Mezclar ghassoul con una infusión de caléndula (o cualquier otra adecuada a tu tipo de piel) media cucharada de miel y una cucharada de aceite de nigella sativa, mezclar bien y aplicar al rostro limpio y seco evitando la zona de los ojos y dejar actuar hasta que se seque. Lavar con agua, y aplicar unas gotas de aceite de comino negro.
Se puede hacer la máscara con hidrolatos y añadir también unas gotas de aceite esencial.

LA RECETA:

Oliva 75%, Laurel 20%, Nigella sativa 5%.

424 gramos de aceite de oliva
113 gramos de aceite de bayas de laurel (en la traza)
28 gramos de aceite de nigella sativa (en la traza)

73 gramos de sosa
155 gramos de agua

Sobreengrasado 5% y concentración 32%




Próxima entrada: Jabón de Alepo con aceite de Argán




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sábado, 9 de junio de 2012

Los Tradicionales (IV) - Jabón de Alepo



En estos días, cada vez que pienso en Alepo inmediatamente recuerdo las terribles imágenes que vemos en la televisión mostrando la masacre que este pueblo esta sufriendo, no me gusta hablar de política en mi blog, pero a la hora de escribir esta entrada no puedo dejar de expresar mi deseo de que esta espiral de violencia acabe y que los ciudadanos de Siria puedan vivir pronto en paz y en libertad.


El jabón de Alepo está hecho con aceite de oliva (segunda presión en caliente, con una acidez de 10º) y aceite de bayas de laurel, la proporción de aceite de bayas determina su calidad y precio, la sosa que utilizan puede ser química, procedente de cenizas, o de sedimentos marinos mezclados con cal y disueltos en agua, estos ingredientes se ponen a cocer en un proceso que lleva varios días y cuando los aceites están completamente saponificados hacen un lavado con sal que elimina el exceso de sosa. Después se extiende sobre el suelo la pasta jabonosa para su endurecimiento y posteriormente se corta y se le pone el sello con la indicación del nombre de la fábrica, el porcentaje de bayas de laurel que tiene y el nombre de Alepp, la fabricación se realiza de noviembre a marzo, que es el periodo de cosecha de las aceitunas.

Finalmente se apila de forma que permita el paso del aire entre los jabones y se deja curar por un periodo mínimo de 9 meses, aunque siempre dejan algunos jabones para que tengan un curado mas largo ya que hay clientes que los prefieren así, ya que opinan que ganan en calidad.

En esta etapa el jabón cambia de color ya que se oxida con la luz, pero si cortamos este jabón en su interior tiene un profundo color verde, yo no lo he cortado, pero lo que si he hecho es mostraros otra de sus características, y es que flota:


Los jabones de Alepo llevan en su composición un porcentaje de aceite de bayas de laurel que normalmente va desde el 5% al 40%, siendo los más comunes los que llevan entre el 20%  y el 25%.
Las concentraciones más bajas de aceite de bayas (5%) se recomiendan para personas que sean sensibles a la toxicidad de este aceite, mientras que las más altas son aconsejables para quienes tengan una patología que quieran mitigar con este jabón. 

No olvidar que:  El laurel es una de las plantas que con más frecuencia producen dermatitis de contacto y fenómenos de fotosensibilización (Wikipedia)

Vamos a ver ahora las características del aceite de bayas de laurel:

Aceite de bayas de laurel: Laurus Nobilis L.

Índices de saponificación: KOH =0.198, NaOH =0,141

Ácidos Grasos:

Láurico:  25%
Mirístico: 1%
Palmítico: 15%
Esteárico: 1%
Ricinoleico: 0%
Oleico: 31%
Linolénico: 26%
Linoleico: 1%

El ácido láurico da dureza, limpieza y espuma al jabón, el palmítico dureza, permanencia y cremosidad en la espuma, el oleico y el linolénico suavidad en el jabón y aporta propiedades para la piel.

Propiedades del aceite de bayas de laurel:

Potente antibacteriano de gran espectro.
Antiviral
Fungicida
Analgésico y antiviral
Regulador del sistema nervioso
Mucolítico y expectorante
Antiespasmódico

Indicaciones:
Afecciones virales.
Artritis, poliartritis, reumatismo osteomuscular y deformante
Odontalgia, gingivitis.
Afecciones cutáneas, acné, forúnculos, ulceras
Piel grasa.
Cuidado de las pestañas (hacerlas crecer)
Astenia mental, depresión,
Micosis cutánea

Precauciones:
Desaconsejado en los tres primeros meses de embarazo
Posible sensibilización alérgica, utilizar diluido con precaución.



LA RECETA:
584 gramos de aceite de oliva
146 gramos de aceite de bayas de laurel

94 gramos de sosa
201 gramos de agua

Sobreengrasado 5%, concentración 32%

Tiene un delicioso aroma a laurel y no lleva colorantes.




Información sobre el aceite de laurel: (en francés)

Video de la fabricación del jabón de Alepo:



Próxima entrada: Alepo con Nigella Sativa (Comino negro)



miércoles, 23 de mayo de 2012

Los Tradicionales (III) - Jabón de Marsella


El “Code appellation du savon de Marseille” regula el tipo de aceites que se pueden emplear, el proceso de fabricación, y las características finales del jabón.

Los fabricantes producen bajo esta denominación varios tipos de jabón: 

El famoso cubo blanco de distintos pesos, con la inscripción “Extra pur 72% d’huile”, que indica que el 72% de los ingredientes empleados en su fabricación, son una combinación de aceites vegetales formada generalmente por oliva, palma y coco, aunque en algunas ocasiones se añaden aceites de pepita de uva o maíz.


El cubo verde, idéntico al anterior, y el aceite empleado es oliva únicamente.


Los cubos de colores, a los que se añaden diferentes aceites esenciales.


Y finalmente los “savonnettes” que están hechos de los restos del jabón blanco, triturados y a los que se  añaden aceites esenciales y colorantes, algunas veces mantecas como el karité y, finalmente se les comprime dándole la forma de pastillas. 



Usos recomendados:
Para la toilette: Recomendado por los dermatólogos en caso de eczema o de intolerancia a los jabones sintéticos. 
Limpieza de ropa: antes de lavar, frotar la mancha con jabón.
Dar brillo a las joyas: Diluir un trozo de jabón en agua caliente y sumergir las joyas.
Limpiar los pinceles: Dejarlos sumergidos en agua jabonosa.
Limpieza de cueros: Frotar con un cepillo enjabonado y aclarar.
Nutrir y limpiar suelos: Lavar y aclarar.
Perfumar la ropa: Colocar un trozo de jabón en los armarios.
Antipolillas: Poner un trozo de jabón entre la ropa
Satinar la piel: Utilice el jabón de Marsella para exfoliar la piel.
Para el afeitado: Frotar la brocha en el jabón hasta obtener mucha espuma.
Como dentífrico: Es bueno para las encías.

Y para finalizar, he visto que en Francia recomiendan este truco de la abuela contra los calambres nocturnos en las piernas: Colocar un jabón de Marsella todas las noches entre las sábanas al nivel de las piernas. Me ha asombrado la cantidad de sitios que lo recomiendan, todo el mundo dice que funciona. Yo os lo dejo aquí como curiosidad, aunque lo más difícil es saber qué día va a tener uno un calambre para colocar previamente el jabón, ¿o no?. 

Como hacer jabón para lavar la ropa:

80 gramos de jabón de Marsella
1,5 litro de agua
1 cuchara de sopa de vinagre blanco
1 cuchara de sopa de bicarbonato
Agitar fuertemente hasta mezclar todo.
Con el jabón limpiaremos la ropa, el bicarbonato protegerá los colores y el vinagre evitará calcificaciones en la lavadora. 


Como los porcentajes de aceites que se utilizan en el cubo blanco del jabón de Marsella los determina cada fabricante y lógicamente no se hacen públicos, no tenía ninguna referencia a la hora de formular "mi jabón de  Marsella", y con la idea clara de poner un porcentaje alto de aceite de oliva, pensé en usar un 72% que es una cifra emblemática relacionada con estos jabones, y con ella empecé mis cálculos, añadiendo un 8% de aceite de coco y un 20% de aceite de palma para completar la fórmula.

LA RECETA:
521 gramos de aceite de oliva
58 gramos de aceite de coco
145 gramos de aceite de palma

 96 gramos de sosa
205 gramos de agua

5% de sobreengrasado, y 32% de concentración.

Algunos links de interés: 
Video de fabricación jabón Marsella: (en francés)
http://www.ina.fr/economie-et-societe/vie-sociale/video/I07347871/le-savon-serail-de-marseille.fr.html

Proceso fabricación: (en francés)
http://www.savon-leserail.com/francais/fabrication.htm 

Próxima entrada: Jabón de Alepo.


viernes, 11 de mayo de 2012

Los tradicionales (II) - Jabón de Castilla

No os voy a contar la historia del jabón de Castilla, ni tampoco a hablaros de las propiedades cosméticas del aceite de oliva, porque con una simple búsqueda en Internet encontraréis mucha información. Quiero contaros aquí pequeñas historias que me gustaría compartir con vosotros. 

En los territorios de la Corona de Castilla había numerosas fábricas de jabón, desde donde se exportaba a Europa y a América, en Andalucía recibían el nombre de Almonas. 

He buscado información sobre estas fábricas de jabón y he encontrado numerosas referencias en muchos pueblos, pero lamentablemente no queda ninguna en funcionamiento. 

En el año 2003 el Aula Gerión publicaba varios artículos en donde lamentaba la demolición de la antigua almona de Sanlúcar de Barrameda, como no he podido encontrar ninguna referencia posterior, me imagino que ya habrán consumado este atentado contra nuestra historia. Os pongo un enlace donde podréis ver fotos del edificio y de múltiples vasijas, dispuestas para…, no se, esperemos que alguna se haya salvado:


También creo que os gustará ver una reseña aparecida en el periódico ABC el 6 de julio de 1917 sobre una fábrica de jabones y perfumes. Ver a la izquierda, artículo Aromas de la tierruca, me encanta como empieza el artículo: Entre las cosas notables que agradan al mundo elegante y a los españoles de bien,…


También es curioso este método de fabricación de jabón: 


Pero no penséis que ya no hay fábricas de jabón 100% de oliva, las hay, en… Nablús, Palestina, donde lo fabrican desde 1611, siempre pensé que este jabón era como el de Alepo, pero he visto que no, que es 100% oliva, así que muy lejos de España, se sigue fabricando el jabón de Castilla: 

Nablús: Historia y proceso de fabricación (en inglés): 


Video del proceso de fabricación del jabón de Nablús: 


Espero que os haya gustado el recorrido por diferentes páginas sobre el jabón, para mi son como pequeñas joyas que me gusta ver. 

Y ahora vamos a mi jabón de Castilla. 

Me puse a hacerlo y me extraño lo mucho que tardó en trazar, ya se que el jabón de oliva tarda mucho, pero con la sosa y el aceite a 30º y una concentración de 32% no tenía que tardar tanto, al fin conseguí la traza y enmoldé, por mucho que lo abrigué no conseguí que gelificara y al día siguiente seguía muy blando y al otro y al otro, total que cuatro días después parecía un poco más duro y lo saqué, fui a cortarlo y por dentro estaba muy blando, pero que muy blando, (como cuando dejamos la mantequilla fuera de la nevera en un día de calor), así que lo deje para que siguiera endureciendo y al día siguiente, aun viendo que por fuera estaba un poco blando, hice una prueba y corte otra pastilla y aquí vino lo peor, por dentro estaba más duro que una piedra. Era el jabón más extraño que había visto en mi vida, por dentro estaba tan duro que al intentar cortarlo se rajaba el jabón y salía a trozos, mientras por fuera lo apretabas se marcaban los dedos en la barra. ¿¿¿¿???? Revisé la receta y las cantidades estaban bien. Mal comienzo, no sabía que hacer: lo que tenía cortado no servía para hacer el experimento que tenía en mente, tenía que ir directo a un refundido (agghhh) y empezar de nuevo. Vuelta a mirar todo, y lo único que había diferente era la sosa, era la misma de siempre, la de Mercadona, pero el envase era nuevo, a lo mejor podía estar mal… 

Aquí os enseño una foto de los jabones refundidos (los dos de arriba) y de la primera pastilla que corté (la de abajo, sin sello), si os fijáis en la pastilla, se ve como blanda y después de todo este tiempo: ¡la pastilla sigue un poco blanda! Voy a dejarla a ver como evoluciona.  


Al día siguiente hice un nuevo jabón, todo igual, pero con otra sosa, y aquí sin ningún problema, llegó la traza en cinco minutos, gelificó y al cortarlo ningún problema. La foto de estos nuevos jabones es la que está al inicio de esta entrada. 

LA RECETA: 
760 gramos de aceite de oliva virgen sin filtrar 
97 gramos de sosa 
207 gramos de agua destilada
5% sobreengrasado, 32% concentración. 
En la calculadora de un índice de dureza de 45, pero os puedo asegurar que está muy duro. 

Próxima entrada: Jabón de Marsella.