En estos días, cada vez que pienso en Alepo inmediatamente recuerdo
las terribles imágenes que vemos en la televisión mostrando la masacre que este
pueblo esta sufriendo, no me gusta hablar de política en mi blog, pero a la
hora de escribir esta entrada no puedo dejar de expresar mi deseo de que esta
espiral de violencia acabe y que los ciudadanos de Siria puedan vivir pronto en
paz y en libertad.
El jabón de Alepo está hecho con aceite de oliva (segunda
presión en caliente, con una acidez de 10º) y aceite de bayas de laurel, la
proporción de aceite de bayas determina su calidad y precio, la sosa que
utilizan puede ser química, procedente de cenizas, o de sedimentos marinos
mezclados con cal y disueltos en agua, estos ingredientes se ponen a cocer en
un proceso que lleva varios días y cuando los aceites están completamente
saponificados hacen un lavado con sal que elimina el exceso de sosa. Después se extiende sobre el suelo la pasta jabonosa para su
endurecimiento y posteriormente se corta y se le pone el sello con la indicación
del nombre de la fábrica, el porcentaje de bayas de laurel que tiene y el nombre
de Alepp, la fabricación se realiza de noviembre a marzo, que es el periodo de cosecha
de las aceitunas.
Finalmente se apila de forma que permita el paso del aire
entre los jabones y se deja curar por un periodo mínimo de 9 meses, aunque
siempre dejan algunos jabones para que tengan un curado mas largo ya que hay
clientes que los prefieren así, ya que opinan que ganan en calidad.
En esta etapa el jabón cambia de color ya que se oxida con
la luz, pero si cortamos este jabón en su interior tiene un profundo color
verde, yo no lo he cortado, pero lo que si he hecho es mostraros otra de sus
características, y es que flota:
Los jabones de Alepo llevan en su composición un porcentaje de
aceite de bayas de laurel que normalmente va desde el 5% al 40%, siendo los más
comunes los que llevan entre el 20% y el
25%.
Las concentraciones más bajas de aceite de bayas (5%) se
recomiendan para personas que sean sensibles a la toxicidad de este aceite,
mientras que las más altas son aconsejables para quienes tengan una patología
que quieran mitigar con este jabón.
No olvidar que: El laurel es una de las plantas que con más
frecuencia producen dermatitis de contacto y fenómenos de fotosensibilización (Wikipedia)
Vamos a ver ahora las características del aceite de bayas de
laurel:
Aceite de bayas de laurel: Laurus Nobilis L.
Índices de saponificación: KOH =0.198, NaOH =0,141
Ácidos Grasos:
Láurico: 25%
Mirístico: 1%
Palmítico: 15%
Esteárico: 1%
Ricinoleico: 0%
Oleico: 31%
Linolénico: 26%
Linoleico: 1%
El ácido láurico da dureza, limpieza y espuma al jabón, el
palmítico dureza, permanencia y cremosidad en la espuma, el oleico y el
linolénico suavidad en el jabón y aporta propiedades para la piel.
Propiedades del aceite de bayas de laurel:
Potente antibacteriano de gran espectro.
Antiviral
Fungicida
Analgésico y antiviral
Regulador del sistema nervioso
Mucolítico y expectorante
Antiespasmódico
Indicaciones:
Afecciones virales.
Artritis, poliartritis, reumatismo osteomuscular y
deformante
Odontalgia, gingivitis.
Afecciones cutáneas, acné, forúnculos, ulceras
Piel grasa.
Cuidado de las pestañas (hacerlas crecer)
Astenia mental, depresión,
Micosis cutánea
Precauciones:
Desaconsejado en los tres primeros meses de embarazo
Posible sensibilización alérgica, utilizar diluido con
precaución.
LA RECETA:
Sobreengrasado 5%, concentración 32%
Tiene un delicioso aroma a laurel y no lleva colorantes.
Información sobre el aceite de laurel: (en francés)
Video de la fabricación del jabón de Alepo:
Próxima entrada: Alepo con Nigella Sativa (Comino negro)